Inversiones digitales

La gestión de las finanzas personales puede parecer un desafío paralizante, sobre todo cuando vas justito económicamente, pero existen métodos sencillos que pueden ayudarte a mantener tus finanzas en orden y alcanzar tus metas financieras. Uno de los métodos más populares y efectivos, que te muestro hoy, es el método o regla 50/30/20, que te permitirá ahorrar mes a mes y tener controlados los gastos.

Te explico en qué consiste este método, cómo implementarlo y por qué puede ser la clave para una vida financiera más saludable y equilibrada, pues la libertad financiera comienza por controlar tus gastos y que sean menores que los ingresos.

Mentalidad de ahorrador

Son dos los grandes problemas a los que se enfrenta cualquier persona que quiera generar ahorro para poder invertir: Las circunstancias y la mentalidad. Me explico:

• Las circunstancias. Como decía Ortega y Gasset, «yo soy yo y mis circunstancias». Con esto quiero decir que las circunstancias financieras de cada uno de nosotros nos marcan y pueden ser una limitante para el ahorro y la inversión. Si el sueldo no nos llega y los gastos necesarios son mayores que aquel, será muy difícil salir de la «carrera de la rata», como denomina Robert Kiyosaki al entorno en el que nos movemos casi todos, para pasar a vivir de las inversiones. Se puede tener mucha aptitud y ser una hormiguita ahorradora, pero en estas circunstancias hay que hacer virguerías, aunque nos puede ayudar la tener mentalidad apta para tratar de mejorar nuestra situación.
• Mentalidad. Las circunstancias pueden ser malas o presentarnos posibilidades para salir adelante, pero si no tenemos mentalidad de mejora, de ahorro o de salir de nuestra vida por encima de nuestras posibilidades, no avanzaremos mucho. Sea por un problema de adicción al gasto inútil, por no saber decir «eso no se puede comprar», o por otras causas, si no hay intención de cambiar nuestra situación financiera, estaremos abocados a quedarnos en la carrera de la rata.

Qué es la regla 50/30/20

El método 50/30/20 es una estrategia de gestión financiera personal desarrollada por la senadora estadounidense Elizabeth Warren y su hija, Amelia Warren Tyagi, en su libro «All Your Worth: The Ultimate Lifetime Money Plan«, que ayuda a catalogar y distribuir tus ingresos, gastos y ahorro en función de su importancia en el conjunto de nuestras finanzas mensuales. Esta regla divide tus ingresos netos en tres categorías principales:

• 50% para necesidades y gastos esenciales
• 30% para deseos o caprichos
• 20% para ahorro e inversiones

50% para las necesidades y gastos esenciales

La regla 50/30/20 comienza recomendando que, como máximo, la mitad de tus ingresos mensuales debe destinarse a cubrir tus necesidades básicas. ¿Y cuáles son estas? Fundamentalmente podemos definirlas como aquellos gastos periódicos que no podemos soslayar, por ser esenciales para nuestra vida o economía:

• Alquiler o hipoteca
• Servicios y consumos básicos (electricidad, agua, gas, teléfono…)
• Alimentación
• Transporte
• Educación de los hijos
• Seguro de salud
• Pagos mínimos de deudas

Es muy importante que mantengamos esta categoría dentro del máximo del 50%. Es decir, que lo ideal (como con cualquier gasto) es que sea lo mínimo posible, pero que como máximo no supere la mitad de tus ingresos. Es esencial priorizar estos gastos para asegurarte de que estás cubriendo todos tus costos vitales sin comprometer tu estabilidad financiera.

En este sentido conviene recordar el límite que suelen poner los bancos cuando nos conceden una hipoteca, que no supere el 30% de nuestros ingresos. Esto nos lleva a que el 50% sea un porcentaje de gastos necesarios totales bastante plausible. Obviamente, este porcentaje se verá (o debería verse) muy reducido si no tenemos hipoteca (o alquiler), que suelen ser los gastos más importante de un hogar.

30% para Deseos

El 30% de tus ingresos se destinaría a lo que se vienen llamando deseos y gastos discrecionales o caprichos. Para entendernos, esta categoría incluye:

• Salidas a comer
• Entretenimiento (cine, conciertos, eventos)
• Viajes
• Compras no esenciales (ropa, gadgets)

Esta porción de tu presupuesto te permite disfrutar de la vida y darte algunos lujos, siempre y cuando no comprometan tu capacidad de cubrir tus necesidades y ahorrar para el futuro. Pero ojo, también aquí se trata de un máximo, y sin privarnos de algún capricho o gasto discrecional, debemos procurar que no supere el 30%, o incluso que sea lo más bajo posible. Esto nos permitirá, junto con el control del primer apartado, irnos liberando de ahogos económicos, aumentar poco a poco el siguiente apartado, como primer paso para lograr vivir dentro de nuestras posibilidades, invertir y alcanzar la libertad financiera.

20% para Ahorro e Inversiones

Y por fin llegamos a la última y tan codiciada categoría, la del 20% de tus ingresos destinado a ahorro e inversión, como por ejemplo:

• Ahorros de emergencia
• Fondos de jubilación
• Inversiones
• Pago de deudas adicionales

Este componente es crucial para construir una base financiera sólida y prepararte para el futuro. Invertir en tu ahorro e inversiones asegura que estás trabajando hacia tus metas financieras a largo plazo.

¿Cómo Implementar el Método 50/30/20?

Implementar el método 50/30/20 es relativamente sencillo y se puede adaptar a cualquier nivel de ingresos. Para ponerlo en práctica puedes comenzar con una libreta, una hoja de cálculo (excel…) o alguna aplicación como las que te digo más adelante. Sigue estos pasos para empezar:

1. Calcula tus ingresos netos: Determina cuánto ganas después de impuestos y deducciones. Es decir, lo que te queda de nómina para los demás gastos ya mencionados.
2. Divide tus ingresos: Usa la fórmula 50/30/20 para dividir tus ingresos en las tres categorías mencionadas.
3. Analiza tus gastos actuales: Revisa tus gastos mensuales y clasifícalos en necesidades, deseos y ahorros/inversiones.
4. Ajusta tu presupuesto: Si tus gastos actuales no se alinean con la regla 50/30/20, ajusta tu presupuesto para cumplir con estas proporciones.

Herramientas y Recursos

Para facilitar la implementación del método también puedes utilizar herramientas y aplicaciones de gestión financiera como:

• Mint: Una aplicación gratuita que te ayuda a crear presupuestos y monitorear tus gastos.
• You Need a Budget (YNAB): Un software de presupuesto que sigue una filosofía similar al método 50/30/20.
• Spreadsheets de Google: Una forma simple y efectiva de rastrear y categorizar tus gastos manualmente.

Beneficios del Método 50/30/20

Existen otros sistemas de ahorro que iremos viendo en este blog. Pero el método 50/30/20 ofrece varios beneficios significativos:

• Simplicidad: Es fácil de entender y aplicar, incluso para quienes no tienen experiencia en finanzas.
• Flexibilidad: Se puede adaptar a diferentes niveles de ingresos y estilos de vida.
• Balance financiero: Ayuda a mantener un equilibrio saludable entre gastos necesarios, deseos y ahorro.
• Disciplina: Fomenta una gestión financiera disciplinada, lo que puede llevar a una mayor estabilidad y éxito financiero a largo plazo.

Comparación con Otros Métodos de Presupuesto

Método de Sobres

El método de sobres implica dividir el dinero en diferentes sobres físicos para cada categoría de gasto. Es más tangible pero menos flexible que el método 50/30/20.

Presupuesto Base Cero

En el presupuesto base cero, cada dólar que ganas se asigna a un gasto o ahorro específico. Es más detallado y requiere más tiempo que el método 50/30/20.

Método de 80/20

El método 80/20 sugiere destinar el 80% de los ingresos a gastos y el 20% a ahorros. Es más simple pero puede no ser tan equilibrado como el método 50/30/20.

Adaptaciones del Método 50/30/20 en Diferentes Contextos

Personas con Ingresos Variables

Si tienes ingresos variables, ajusta tus porcentajes mensualmente para adaptarte a tus ingresos cambiantes. Asegúrate de tener un fondo de emergencia robusto para cubrir periodos de ingresos bajos.

Familias

Para las familias, es crucial priorizar las necesidades comunes y asegurarse de que todos los miembros estén alineados con el presupuesto. Involucra a todos en la planificación financiera.

Estudiantes

Los estudiantes pueden adaptar el método 50/30/20 según sus ingresos limitados. Prioriza los ahorros para la educación y los gastos esenciales, y limita los deseos tanto como sea posible.

En fin, todo es cuestión de concienciarse de la necesidad de controlar los gastos y que no nos coman por los pies. De hacer cuentas y sacrificarse un poco, sabiendo distinguir lo que es realmente importante de lo superfluo. Ya solo me queda decirte ¡MANOS A LA OBRA!

Preguntas frecuentes. FAQs

Qué es el método 50/30/20?

El método 50/30/20 es una regla de presupuesto que divide tus ingresos en tres categorías: 50% para necesidades, 30% para deseos y 20% para ahorros e inversiones.

Cómo puedo empezar a usar el método 50/30/20?

Para empezar, evalúa tus ingresos netos y clasifica tus gastos en las tres categorías principales. Luego, ajusta tus gastos para cumplir con las proporciones del método.

Qué se considera una necesidad en el método 50/30/20?

Las necesidades son gastos esenciales como vivienda, alimentos, servicios públicos, transporte y atención médica.

Qué hacer si mis necesidades superan el 50% de mis ingresos?

Si tus necesidades superan el 50% de tus ingresos, intenta reducir gastos en otras áreas o buscar formas de aumentar tus ingresos.

Puedo ajustar el método 50/30/20 según mis circunstancias?

Sí, el método 50/30/20 es flexible y puedes ajustarlo según tus necesidades y circunstancias individuales.

Es efectivo el método 50/30/20 para todas las personas?

El método 50/30/20 es efectivo para la mayoría de las personas, pero es importante adaptarlo a tu situación financiera específica para obtener los mejores resultados.